sábado, diciembre 17, 2005

EL RIO DE LA FERTILIDAD

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Cuando solángel abandonó la cueva encontró el cielo nublado y una sensación de angustia se apoderó de su ánimo.

Corrió colina abajo y cuando se aprestaba a entrar al bosque, frente a ella apareció un río majestuoso que la envolvió entre sus olas y rápido se la llevó del lugar, dejando atrás una sombra agazapada que dejó escapar un sonido de frustración.

Durante varios minutos la niña sintió el cálido abrazo del río y supo de quién se trataba. Era el Río de la Fertilidad. De pequeña había oído su triste historia, contada alrededor de la hoguera que señalaba el fin del invierno.

"Cuando el tiempo era joven -hablaba el anciano mayor- el Río de la Fertilidad no se ocultaba a la vista de los hombres. Todos los días visitaba las aldeas y en sus aguas mágicas los pobladores renovaban sus riquezas. No obstante, Yagumani, apodada la Impenetrable, cuyas aguas yermas jamás habían conocido la bendición del agua, vigilaba sus movimientos.

"Por esto, ladinamente, noche a noche, Yagumani fue alterando su curso, atrayéndolo hacia su trampa. La noche de su rapto lo encontró dormido al borde de sus dominios, por lo que apenas le costó un pequeño esfuerzo conducirlo a sus entrañas.

"El Río de la Fertilidad luchó por salir, pero las grutas, las cañadas, las profundas hondonadas, hicieron inútiles sus esfuerzos.

"Recogido en sí mismo vagó sin cesar, transformado en manso riachuelo. Con el tiempo aprendió los secretos de Yagumani y en cada sima y recoveco palpó las infinitas formas de su maldad.

"Mientras tanto, los hombres lloraban su ausencia; desde su partida la selva se había vuelto estéril y sólo la muerte aliviaba el sufrimiento.

"Los ruegos por su retorno llegaron hasta el Padre Sol y por una vez descendió al mundo, apartando de sí la neblina que siempre había cubierto a la Impenetrable.

"Yagumani no pudo impedir que el cautivo se convirtiera en nube y que, veloz emprendiera la huida, como tampoco que luego cubriera como lluvia la marchita selva.

"Se prometió buscarlo, pero ya la tierra lo había recogido en su seno y muy lejos, en lo profundo de la espesura, lograba su rescate para la vida".

Mientras la voz se diluía en su memoria, el río la depositó con cuidado a la orilla de la Laguna Dorada.

- -Espera, no te vayas -exclamó Solángel, mientras extendía los brazos intentando retenerlo.

Pero el río, nervioso, se alejó con prisa del lugar, multiplicando toda la vegetación que se reflejaba en él. Temía a la Impenetrable y pensaba que de no cambiar su curso una y otra vez, ella de nuevo lo atraparía.

Por un rato Solángel caminó de aquí para allá hasta encontrar un bosque de árboles frutales donde sació su hambre y encontró abrigo.

en la selva
Solángel
el destino de cada criatura
en alguna forma
es también nuestro destino

su voz
lo recuerdo padre
era suave pero firme
y sólo se quebró
cuando su mirada se detuvo
al pie del roble sagrado
donde reposa mi madre
Luzbella

5 Comments:

Blogger Unknown said...

hay que perderle el miedo a volar.
buen blog me gusta mucho.
saludos

9:55 a. m.  
Blogger Marco said...

tify:
Gracias por su visita y su comentario. La gran aventura de Solángel continúa. Espero no se pierda su desarrollo y desenlace.

12:17 p. m.  
Blogger Marco said...

lully:

Para leer lo único que se requiere es tener sensibilidad y de eso, según lo he podido ver en tu blog, tienes de sobra.

Gracias por acompañar a Solángel. Ella y yo estamos complacidos de los nuevos amigos que estamos conociendo.

12:09 p. m.  
Blogger Unknown said...

Hello!! Marco...
pasba por aca y bueno cada vez que leo a Solangel, me inspiro, el rio de la fertilidad me ha puesto a pensar...y bueno tal vez algunas veces es mejor irse por ese rio.....
sobre desearte un feliz año lleno de muchas cosas buenas, exitos y bueno mas inspiracion con la historia deSolangel......... asi tambien se llama mi prima, por ñlio cual tienes ya una fan No 1...
saludos

10:30 a. m.  
Blogger Marco said...

Gracias tify, lo propio te deseo para ti y para los tuyos. Tu comentario me inspira para seguir adelante.
Un abrazo

1:03 p. m.  

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